DANI BECERRA | El maratoniano Antonio Marí Colomar 'Buitre' (Ibiza, 1974), todavía nota en las piernas el derroche de esfuerzo que realizó el pasado sábado en el Ibiza Marathon, la competición más especial de su trayectoria como corredor de fondo, en la que se alzó con el bronce ante una multitud de amigos, familiares y vecinos de su pueblo.
El corredor del Triatló Santa Eulària es todo un ejemplo de sacrificio y humildad, valores inherentes de un hombre cercano y divertido que vive alejado de toda ostentación. Su cabeza rapada y su fibrada figura son sus señas de identidad. En el Maratón de Sevilla (2015) logró establecer la mejor marca de las Pitiusas con 2h33'41", un récord que intentará batir este año en el Maratón de Valencia.
Pregunta. - ¿Cómo llevas la recuperación del sobre esfuerzo?
Respuesta. - Ayer no hice nada y hoy he corrido media hora. Aún noto las piernas un poco pesadas y los gemelos cargados, pero nada importante. Esta semana rodaré y la que viene ya podré meter alguna serie.
P. - Han pasado 48 horas del Ibiza Marathon, ¿cuál es tu balance?
R. - Cada hora que pasa lo hago más positivo. Es verdad que esperaba hacer un minuto y medio menos, pero dada la exigencia del circuito, que fue más duro de lo que esperaba, el tiempo no fue malo. Y si a eso le añades el cariño que me dio la gente cuando llegué, el balance es tremendamente bueno.
P. - ¿Cómo valoras el Ibiza Marathon?.
R. - En cuanto a organización un 10. El equipo de Talentum Group son gente encantadora y estuvieron muy atentos en todo momento. Por otro lado, hay que recalcar que el circuito es muy duro y que correr a las 15.00 horas no es el mejor momento para hacer un maratón.
R. - ¿Cómo fue tu carrera?
P. - Los 10 primeros kilómetros los corrí solo, luego cogí a un corredor catalán y a partir del kilómetro 25 me quedé otra vez solo. Iba toda la carrera pensando que corría en casa y me tenía que dejar hasta la última gota de sangre si fuera necesario.
R. - ¿Qué fue lo primero que se te paso por la cabeza al cruzar la meta?
P. - Vi a tanta gente llamándome por el paseo, los bares, los balcones... fue un estallido de emociones difícil de explicar. En meta me vino a saludar muchísima gente y no me esperaba recibir tantas muestras de cariño, fue el día más bonito de mi carrera como deportista.
Buitre celebrando su llegada.
P. - ¿Cómo supiste que ibas tercero?
En el kilómetro 32 llegó un ciclista y me dijo: tengo que acompañarte que vas tercero. Y le respondí que no, que yo era el cuarto. Entonces me dijo: mira a tu lado. Y vi que estaba la ambulancia llevándose a uno de los keniatas, que se ve que agarró un pajarón increíble.
P. - ¿Cuál fue el tramo más duro?
R. - Lo más duro seguramente fueron los 7 primeros kilómetros, lo que pasa que vas fresco y no te enteras. Luego la subida de Juan XXIII a Sa Blancadona, que deben ser unos 700 metros y la subida al cruce de Jesús también se hicieron largas...
P. - Dime algo que te llamara la atención.
R. - La colaboración de los corredores de la 12K abriéndome paso. Al mínimo aviso la gente se abría sin problemas, gesto que agradezco mucho porque a esas alturas iba muy justo de fuerzas. El chaval de me seguía con la bicicleta también se lo trabajó mucho.
R. - ¿Qué fue lo mejor y lo peor del Ibiza Marathon?
R. - Lo mejor sin duda el calor del público. Allá por donde pasaba aparecía gente dándome gritos de ánimo y la llegada también fue increíble, jamás la podré olvidar. Lo peor, el horario. Como te digo no se puede correr un maratón a las tres de la tarde. La carrera habría que hacerla por la mañana, por ejemplo, a las 8:30 horas.
P .- ¿Cambiarías algo del recorrido?
R. - No. Ya que ha empezado con este diseño, que continúe así. Está claro que no es un recorrido para hacer marca y a pesar de la extrema dureza preferiría que lo mantuvieran así para poder comparar tiempos.
P. - ¿Volverás a participar el año que viene?
R. - Seguro que sí. Yo soy un maratoniano, estoy aquí en casa y seguro que querré bajar un poco mi marca, aunque sean solo 10 segundos. De hecho estoy pensando en hacer Maratón de Valencia, Maratón de Sevilla y después el Ibiza Marathon. Queda mucho, puede pasar de todo, pero en principio esta es la idea.
R. - En qué ha superado esta competición a la de Sevilla (2011) cuando lograste la mejor marca de las Pitiusas con 2h33'41”
R. En emoción. Correr en casa ha sido muy especial y de estado físico creo que estaba un poco mejor que es Sevilla, los test de 32 kilómetros que había marcado me salieron mucho mejor. Pero aún no haciendo mejor marca personal, la satisfacción personal es más grande que la de Sevilla.
En solitario casi toda la prueba.
P. - ¿A quién te gustaría dedicar este bronce?
R. - A mi entrenador, Mariano Riera, que me ha entrenado francamente bien y se ha sabido adaptar a lo que le he pedido. A mi fisio, Ana López, que es una gran profesional y me ha cuidado mucho y a mi mujer, que nunca ha tenido una mala cara en casa a lo largo de esta dura preparación, siempre me ha apoyado.
P.- Entre tantas muestras de apoyo, dime una que te haya sorprendido.
R. - Precisamente la de mi fisio, Ana López. Cuatro o cinco horas antes de la carrera me envió un mensaje que me tocó. Mira que no soy de emocionarme mucho, pero ese mensaje me llegó. Me dijo que me acordara de los buenos entrenos que había hecho, de Mariano de mi mujer... que recordara todos los momentos difíciles que había superado para motivarme... fue muy bonito.
P . - Y ahora que estás en estado de gracia, ¿te has planteado rebajar tu marca personal en maratón?
R. - Sí, intentaré batir mi récord en el Maratón de Valencia, dónde además tengo una espinita clavada porque allí nunca logré correr bien. El 30 de abril voy a competir en los 10 kilómetros de la Ibiza Medía Maratón y luego me tomaré un buen descanso para recuperar y volver con más fuerza.
P. - ¿Cómo te iniciaste en el atletismo?
R. - Empecé como futbolista, futbolista malo... (risas). Pero siempre se me dio bien correr. Jugué en La Peña de juvenil y luego en la Peña Independiente, fueron unos años buenísimos. Luego empecé con el ciclismo donde estuve dos años. Después llegó el duatlón, el triatlón y finalmente la carrera, el fondo ha sido lo que más me ha gustado.
Texas, Buitre y de las Heras.
P. - ¿Qué te ha enseñado este deporte?
R. - A llevar una disciplina y un orden. Si tu preparas un maratón no puedes tomarte una semana en serio y otra un poco más de relax, has de ser constante. El atletismo te enseña a llevar una regularidad en la vida, tienes unos hábitos saludables, te rodeas de gente con buena onda... es todo positivo.
P. - ¿De dónde viene el apodo Buitre?
R. - Cuando tenía 9 años mi pelo era medio rizado y un día jugando al fútbol, un chaval al que apodaban Carrasco por su parecido con el jugador del Barça, me dijo: joder tío, como te pareces a Butragueño. Desde ese día nunca nadie me llamo por mi nombre. Hay gente que no sabe ni como me llamo... (risas).
P. - ¿Eres un corredor maniático?
R. - Sí y un poco supersticioso...siempre me empiezo a poner las prendas por el lado derecho; los calcetines, los zapatos, el pantalón, la camiseta. También los cuatro últimos días previos a una competición me gusta comer y cenar lo mismo, espaguetis a la Boloñesa.
P. - Dime un atleta al que admires.
R. - Manuel Martín Asunción. Si yo tuviera un trabajo como el suyo; de poner bloques, tirar pasta a la pared y coger carretillas de hormigón... en vez de hacer un maratón, ¿sabes lo que haría? estaría en mi casa comiendo pipas, con el cerebro girado y en frente de la tele toda la tarde. Lo de Manuel es digno de admirar, su vida como deportista está poco valorada y sin embargo vale más que cualquier palmarés.